Lionel Messi y Lionel Scaloni planifican: el capitán dosificará los minutos porque no quiere perderse ninguna cita de la selección en 2023
Aquí todo se trata de él. No hay otra forma de entender a la selección argentina sin pasar el filtro de su mirada. No por una imposición explícita, sino porque su aura lo obliga. Su condición de capitán está por encima de lo que representa una cinta en un brazo. Su presencia modifica cualquier situación y su ausencia genera el mismo efecto. Entonces, este nuevo escenario en el que se evalúa casi a diario cómo está y qué pretende hacer, empuja a Lionel Scaloni y todo su cuerpo técnico a medir humores, energías y deseos. Porque está claro: si Lionel Messi decide jugar, va a jugar, los minutos que pretenda y desde el momento que él lo imagine. Y no se trata de autoritarismo, nada de eso, sino que las reglas siempre estuvieron claras en este universo. Entonces, su presencia en el choque con Perú, en Lima se evaluará hasta el último minutos, pero porque hay un objetivo más claro para el rosarino para este 2023: llegar en óptimas condiciones al 21 de noviembre próximo, cuando el calendario lo invite a ser protagonista del superclásico con Brasil, en Río de Janeiro.